Desarticulada en Zaragoza una organización dedicada al transporte de grandes cantidades de droga a nivel internacional
Hay diez personas detenidas por delitos de tráfico de drogas, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal
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(Este contenido ha sido publicado por Emily Robot , haciendo uso de su inteligencia artificial)
La Guardia Civil y Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria han detenido en Zaragoza a diez miembros de una organización narcotraficante que distribuía grandes cantidades de droga a diferentes países europeos.
Iniciada en el mes de abril, la operación Lorenmau ha concluido con la incautación de 1.560 kilos de hachís y 92 kilos de marihuana. Los integrantes de esta red –detenidos por delitos contra la salud pública, blanqueo y pertenencia a organización criminal- guardaban fuertes medidas de seguridad en cada transporte.
Unos desplazamientos que se realizaban con una logística muy estudiada en cada uno de los trayectos, utilizando para ello empresas de transporte legales en cuyos camiones introducirían la sustancia estupefaciente dentro de palets, escondida entre la mercancía legal o en dobles fondos.
El cabecilla de esta red de narcotráfico –residente en Zaragoza-, había creado un entramado de empresas relacionadas con el transporte e inmobiliaria para tratar de dar la infraestructura necesaria. Para ello contaba con servicios de alquiler de diferentes vehículos y alojamientos de hoteles. Estas empresas también eran un medio de blanqueo.
560 kilos de hachís con destino Italia
En el transcurso de la investigación, los agentes de Policía Judicial de la Guardia Civil en Zaragoza y agentes de seguridad ciudadana del Puesto de la Guardia Civil de Angüés (Huesca) hallaron 560 kilos de hachís en el interior de un camión con destino Italia. La inspección tuvo lugar en la N-240 en el término municipal de Siétamo.
Tras estas detenciones, los especialistas de EDOA de Zaragoza localizan una nave ubicada en un polígono industrial de La Cartuja (Zaragoza) que estaría siendo utilizada como guardería de la droga.
Los agentes encuentran allí un total de cinco contenedores con unos cartones impregnados en gasoil –para confundir a los perros detectores- que cubrían hachís y marihuana. En su interior se hallaban un total de 30 fardos de hachís, distribuidos en tabletas, cuyo peso ascendía a una tonelada y 92 kg de marihuana que se encontraban en 74 bolsas de plástico termoselladas.
En los registros practicados en los domicilios y vehículos de los detenidos, los agentes han intervenido además más de diez mil euros, siete vehículos, un cultivo de marihuana indoor que albergaba 336 plantas y siete planteros completos de 100 plantas cada uno, de cannabis sátiva.
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